A menudo me preguntan ¿cuál es mi enfoque en psicoterapia? La respuesta es: ¡No tengo un enfoque! Y eso es lo mejor que se puede hacer.
En este video explico por qué, poniendo como ejemplo las artes marciales; además, describo brevemente la evolución reciente de las ideas integrativas en terapia y cierro exponiendo por qué la Clave Emocional no pretende ser una “escuela” o “enfoque” sino una serie de principios fundamentales aplicables dentro de cualquier escuela o enfoque.
Fui entrevistado hace unos meses para el próximo Boletín Relates sobre “Emociones en Terapia Familiar“. El resultado es una videoconferencia en que expongo con claridad los principios que animan mi forma de trabajar con emociones en terapia familiar y doy algunos consejos a los terapeutas para que aprendan a “ampliar su registro emocional”.
Agradezco a Javier Macías por la entrevista y la estupenda edición del video.
En este video el Prof. Esteban Laso, educador en ambas instituciones, en el Instituto Tzapopan y la Universidad de Guadalajara, México, nos habla de la importancia de las emociones en los procesos de Terapia Familiar y en su utilidad como recurso terapéutico.
Varias de estas ideas han tomado cuerpo en el capítulo de un libro que será presentado en las X Jornadas Internacionales RELATES, en Junio de este año, en el cual propongo una “receta para cocinar intervenciones sistémicas emocionalmente potentes”; una contribución personal a la recuperación de las emociones en el ámbito de la terapia familiar (de la que ya he hablado antes).
Ampliaré esta “receta” en un taller dentro de las mismas Jornadas, que incluirá, posiblemente, un ejemplo in vivo de trabajo terapéutico.
A continuación, la presentación que he usado en la conferencia.
Las emociones están cada vez más presentes en el Zeitgeist contemporáneo. Desde la ubicua “inteligencia emocional” de Goleman, pasando por la serie Lie to Me (vagamente basada en el trabajo de Paul Ekman), hasta el Dalai Lama… Todos queremos saber más de ellas, aprender a reconocerlas, “controlarlas”, transmutarlas…
Incluso la psicología organizacional ha trascendido los modelos conductistas y racionalistas para darles la importancia que merecen (como expongo aquí). Por no hablar de la psicoterapia en su conjunto; hasta los cognitivos, tradicionalmente reacios, han empezado a admitir la necesidad de incorporarlas en su trabajo, como lo demuestran títulos recientes del estilo de Cognitive Emotional Behaviour Therapy o Emotion-Focused Cognitive Therapy. (Lo malo es que se han limitado a añadirla a su lista de técnicas o problemas a abordar, endureciendo sus supuestos teóricos en vez de revisarlos críticamente; igual que Albert Ellis, solamente ponen una palabrita más, “emotional“, en una marca ya existente. Pero esto es harina de otro costal).
Sin embargo, en este reino de las terapias subsiste una irreductible aldea poblada por terapeutas sistémicos que resiste ahora y siempre al invasor… Terapeutas fieles a la maldición batesoniana contra las emociones (en síntesis, “la emoción es un concepto dormitivo que no explica nada“), al desaire de Selvini-Palazzoli y el primer Equipo de Milán (en síntesis, “la emoción no es más que una jugada para obtener ventaja en una lucha de poder”), al dictum de Jay Haley (“la emoción es una simulación“)… Terapeutas que han olvidado a los dos grandes “locos” de la terapia familiar, Virginia Satir y Carl Whitaker, pioneros del trabajo con y desde la emoción. Terapeutas que se mueven en lo pragmático (enviando tareas, prescripciones o rituales) o lo cognitivo (tejiendo reencuadres, metáforas o “diálogos sobre los diálogos”); y que, cuando sus consultantes lloran, se irritan o exclaman “me siento triste”, cambian de tema hábil pero inexorablemente: “y cuando se siente así, ¿qué hace?” o “¿quién más está triste en esta familia?”
“Primariamente amorosos”
En este irreductible grupo se encuentra un teórico y terapeuta (que tuve la fortuna de tener comomaestro), Juan Luis Linares, empeñado en generar una “revolución amable”: recuperar las emociones. Convertirlas en miembros de pleno derecho en la teorización y la práctica de la terapia familiar. Y no sólo la emoción de la familia sino la del terapeuta mismo, que debe usarse como brújula para orientar la conversación en dirección del cambio positivo. Continue reading →
María Caridad Dávalos, presentadora del programa “Análisis” que se transmite en CN3 los jueves por la noche, me invitó hace poco a compartir en ese espacio parte de mi biografía, mis ideas e investigaciones.
Fue una conversación nutrida y espontánea, de la que disfruté mucho. Tuve oportunidad de mencionar a mis grandes maestros en el arte de favorecer el cambio humano, Guillem Feixas y Juan Luis Linares, y de contar algunas anécdotas de mi vida en Barcelona y mi experiencia docente en España, Ecuador, Argentina y México.
We use cookies on our website to give you the most relevant experience by remembering your preferences and repeat visits. By clicking “Accept”, you consent to the use of ALL the cookies.
This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these cookies, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may have an effect on your browsing experience.
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.